Consejos de Conservación | Forma simple de higienizar libros antiguos

Libros antiguos | ¿por qué higienizar?

A menudo la higienización de libros antiguos es devaluada por ser un tipo de tratamiento cuyos resultados no son fácilmente visibles.

Vamos a ver uno de los métodos más simples de limpieza de libros antiguos a partir de un extracto del curso Preservación de Libros y Documentos, de Geraldine Garcia y Diana Bencatel.

Contiene un video tutorial

Sin embargo, el polvo y la «suciedad» son importantes agentes de degradación: conjugados con condiciones ambientales propicias, pueden provocar reacciones de destrucción en todo tipo de soportes y sirven como medio de cultivo y fuente de alimento para diversos organismos.

Por este motivo, su remoción es fundamental para la preservación de cualquier libro o documento.

Se recomienda que se haga, con la regularidad posible, un trabajo de higienización de todos los volúmenes que se pretende preservar.

Este tipo de intervención ayuda a eliminar partículas nocivas de la superficie, como polvo, hongos y desechos de insectos, que de otro modo pueden quedar entrañadas en los materiales.

Métodos de higienización de libros antiguos

Los métodos de higienización utilizados deberán ser elegidos de acuerdo con el estado de conservación del libro o documento.

Se recomienda que se haga, siempre que sea posible, limpieza con métodos secos, por ser más seguro para el material a intervenir.

La limpieza por vía húmeda debe ser hecha sólo por técnicos de conservación y sólo en los casos en que la limpieza por vía seca no tenga éxito, ya que el papel queda más susceptible a sufrir daños.

Hay una gran variedad de equipos y materiales a los que se puede recurrir para efectuar la higienización de libros y documentos.

Atención: se deben seleccionar los equipos adecuados. Tener en cuenta la integridad de la superficie a higienizar y de las tintas de escritura, sin riesgo de daños.