Es frecuente que surjan dudas en cuanto a los términos utilizados para denominar el conjunto de intervenciones que pretendemos efectuar en bienes a preservar, confundiéndose con frecuencia lo que son tratamientos de conservación y de restauración.
La Conservación
¿Qué es «Conservar»?
Una rápida búsqueda en el diccionario nos informa que conservar se traduce por «Mantener [algo] en buen estado».
Por lo tanto, podremos considerar la Conservación como una disciplina que abarca diversos niveles de intervención, cada uno con determinadas especificidades, teniendo todos ellos como propósito preservar uno o varios objetos.
Dentro del área de la Conservación podemos distinguir:
La conservación y restauración de bienes culturales engloba:
Conservación preventiva
Las intervenciones de conservación preventiva tienen como principal objetivo crear condiciones que ayuden a evitar la ocurrencia de daños o pérdidas en los bienes y contribuir a ralentizar el ritmo de envejecimiento de los materiales.
Algunos ejemplos de intervenciones de conservación preventiva son:
– la higienización de obras y de los espacios donde éstas circulan y se almacenan.
– la correcta manipulación y acondicionamiento.
– el control del ambiente, específicamente de los niveles de temperatura y humedad relativa del aire.
Conservación Curativa
En caso de que ya se hayan producido daños o existan daños en curso, pueden aplicarse medidas de conservación curativa que contribuyan para interrumpir procesos de degradación y estabilizar el material, reduciendo así el riesgo de que se produzcan nuevos daños.
Este tipo de intervención puede ser fundamental para mantener la cohesión de los bienes culturales, por ejemplo, hasta que eventualmente se decida realizar una intervención más profunda (restauración). Estas intervenciones funcionan como «primeros auxilios».
Restauración
La restauración es un término frecuentemente utilizado para referirse a intervenciones de conservación y restauración en general.
Sin embargo, la restauración tiene como principal objetivo específicamente devolver el aspecto y/o la función original, en parte o en su totalidad, del material a restaurar.
Este tipo de intervenciones, en las que se interfiere profundamente en el objeto debe ser llevado a cabo sólo por técnicos especializados en restauración.
conservación y restauración de bienes culturales
Entonces la conservación de bienes culturales tiene por objetivo su mantenimiento.
Tiene varios niveles de intervención de acuerdo con el estado de conservación de las obras. En la restauración se interfiere profundamente en el objeto.
Es fundamental no olvidar que la adopción temprana de medidas de conservación se reviste de una enorme importancia para la preservación de cualquier tipo de bien, ya que:
– contribuye a evitar la ocurrencia y/o agravamiento de daños.
– reduce el riesgo de pérdida física del patrimonio documental o bibliográfico, de pérdida de valor de dicho patrimonio, y de pérdida de la información contenida en los libros o documentos.
– reduce considerablemente la necesidad de recurrir a intervenciones más costosas e intrusivas, que a menudo pueden reducir valor a los bienes.
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Gracias,,