La infancia ha sido un tema tratado por muchos pintores a lo largo del tiempo.
La artista impresionista Lilla Cabot Perry representó este periodo en varias de sus obras, y son estas las que se presentan en este artículo.
Who was Lilla Cabot Perry
Lilla Cabot Perry (Lydia) was born in 1848 in Boston and her childhood, according to herself, was very memorable. From an early age, Lilla was interested in literature, music and drawing.
Her parents, who were very sensitive, allowed her access to libraries and museums, while her friends taught her some drawing techniques.
But time passed and Lilla grew up. In 1874, she married Thomas Perry, a professor of linguistics. Two years later, they had a daughter, Margareth, who would become the first girl depicted in Lilla’s paintings. In the following years, Lilla Cabot Perry would give birth to Edith (1880) and Alice (1884). The three daughters became her main models.
El comienzo
En Retrato de un bebé, de 1877, al comienzo de su carrera, Lilla enfatiza un claro juego entre la luz y la sombra para aumentar el impacto emocional de la pintura. Apenas podemos ver el rostro de la pequeña Margaret, que también ignora por completo al espectador.
Tras mudarse a Francia y entrar en contacto con el impresionismo
En 1887, la familia Cabot Perry se mudó a Francia. La pintora continuó sus estudios en París, no solo asistiendo a clases, sino también visitando museos constantemente. Fue en esta época cuando conoció a Claude Monet, Camille Pissarro y Mary Cassatt, artistas impresionistas, con quienes pronto entabló una profunda amistad.
Lilla se interesó por el impresionismo y comenzó a experimentar con este estilo. A partir de entonces, la obra de Lilla se centró en gran medida en los efectos del color y la luz, y aprovechó la oportunidad para retratar a sus hijas en jardines y otros lugares al aire libre.
La técnica de Lilla ha experimentado una gran transformación. En lugar de los dramáticos efectos de luz de sus primeras obras, ahora adoptó un estilo más libre, con pinceladas menos rígidas. Con el tiempo, se convirtió definitivamente en una pintora impresionista. Podemos verlo en este retrato de Alice, su hija menor.
La influencia de los jardines de Giverny y los viajes
Lilla Cabot Perry pasó una temporada en Giverny aprendiendo más sobre la técnica impresionista de Claude Monet. Podemos ver cómo Giverny y Monet influyeron en su estilo: sus obras vibraban con el color, revelando a una artista totalmente absorta en el espíritu del impresionismo.

La familia de Lilla viajaba mucho, lo que contribuyó a diversificar su obra, incluyendo influencias del arte oriental, ya que su marido fue invitado a dar clases en Japón y Lilla aprendió técnicas de pintura japonesa.
Además, el propio movimiento impresionista estuvo muy influenciado por el arte japonés.
El legado de Lilla Cabot Perry
Lilla Cabot Perry siguió pintando hasta su muerte en 1932, a los 88 años. Tuvo una intensa actividad como pintora y su influencia fue muy importante para el reconocimiento del impresionismo en Estados Unidos. Aprovechó todas las lecciones de otros artistas para desarrollar su propio estilo único.
Sus retratos de la infancia son un recordatorio de su legado.